Ayer vimos cómo era el proceso para hacer una Planificación Financiera. Teniendo en cuenta este plan, y los resultados del ejercicio sobre Tomar Conciencia (Si no sabes de qué te estoy hablando puedes leer el Post sobre Tomar Conciencia), vamos ahora a Tomar Medidas. Si no has realizado alguno de los dos ejercicios, tómate primero el tiempo para realizarlos, si quieres obtener verdaderos resultados. Ten en cuenta que si queremos resultados diferentes tenemos que hacer cosas diferentes.
¿Ya ha pasado el tiempo? ¿Cuánto? ¿Una semana? ¿Dos? ¿Un mes? ¿Más de uno?
Entiendo que la mayoría lo haréis solo una semana, porque os cansará u os urgirá cambiar vuestra situación económica, pero tened en cuenta que cuanto más tiempo hayáis hecho este ejercicio, mejores y más fiables resultados habréis obtenido. La dinámica de apuntar todos los gastos, la podéis mantener un tiempo más para que seáis conscientes de todos los gastos que tenéis para seguir recortando. Incluso los que vienen solo una vez al año.
Hora de Tomar Medidas
Bueno, vamos a entrar en materia. Coge ahora todas las libretas o dispositivos que hayáis utilizado, y ve agrupando gastos e ingresos de toda la familia en una hoja aparte. Ingresos del trabajo, ingresos pasivos, ingresos esporádicos, etc. Lo mismo con los gastos: Gasolina, Tarjetas y préstamos, Comida para casa, Comida fuera de casa, golosinas, café, tabaco, etc. Un poco según vayas viendo gastos similares.
Ahora fíjate en el tiempo que has hecho este ejercicio. Como te digo, cuanto más tiempo hayas hecho el ejercicio más lo notarás. Analiza que gastos, así en papel, te parecen desorbitados, que puedas reducir o eliminar completamente. Lo mismo se aplica para todos los miembros de la familia. Decidir entre todos que gastos podéis reducir o eliminar completamente. Solo con eso, ¿cuánto ahorrarías?
¿Comes o cenas en el trabajo? ¿Puedes hacerlo más barato llevándotelo de casa? ¿Puedes reducir el café? O en lugar de tomarlo en el bar o en la máquina, ¿llevarte un termo? ¿Puedes ir andando a algunos sitios y evitar el coche ahorrando gasolina?
¿Tienes teléfono fijo y móvil? ¿Realmente necesitas los dos? ¿Haces las llamadas desde el que te salen más económicas o desde el que tienes a mano? ¿Cuántos móviles hay en casa? ¿Hacen falta tantos? ¿Tarifa de datos? ¿Es necesaria? ¿TV de Pago?
El tabaco no te lo menciono porque sería lo primero que deberías haber quitado tú mismo. No solo es un vicio, sino que beneficiará a tu salud y a la de los que te rodean y, por difícil que lo veas, sabes que es posible. Mucha gente lo ha dejado y, en esta crisis, más. Y si en tu familia fuma más de una persona, calcula el ahorro que supondría dejarlo.
En función de los gastos que hayáis anotado en vuestras libretas seguro que, entre todos, se os ocurren más formas de recortar. Juntaros toda la familia y proponer ideas entre todos, incluso como una competición y, el que más ahorre, que tenga un premio.
Todo lo que no podáis eliminar, tratar de reducirlo. Por ejemplo, en TV de Pago, bajad a un paquete inferior. Comparar los programas de satélite con los “videoclubs online”.
En móviles, reducir la tarifa de datos, cambiaros de tarifa de llamadas. Hay tarifas hasta desde 6 euros. Unificar teléfonos en packs. La mayoría de los operadores los ofrecen. ¿Realmente usamos todo lo que pagamos?
Ahora, con estos gastos en mente, ¿ha cambiado algo el flujo de efectivo disponible que sacamos al principio del post para ver en qué zona estábamos? ¿Podemos mejorar esto?
Pues ponte manos a la obra. Desde mañana mismo antes de las 11 de la mañana. No esperes más. Los pequeños cambios tienen que convertirse en hábitos.
Los gastos más complicados como pueden ser la hipoteca o los préstamos y tarjetas de crédito. Ya los iremos afrontando si no puedes con ellos tu solo. Todo depende de la zona en la que te encuentres.
¿Cuánto has gastado a la semana 30 €, 50, 100? Quítale un 10 % y mira a ver si con eso puedes pasar la semana. Te aseguro que podrás pues, un 10 % no es tanto. Pero, si es mucho, si lo dedicamos a pagos de créditos o recibos importantes.
Y esto al mes lo multiplicamos por 4. ¿No crees que vale la pena intentarlo? Vende cosas que tengas en casa y que no uses, pero que alguien pueda estar interesado, como teléfonos móviles, ropa, un acuario que teníamos hace tiempo, etc.
Están las tiendas de segunda mano y, en Internet, también hay varias y hasta una conocida página de subastas. Todo el dinero que saques dedícalo a pagar los créditos de alto interés.

Si te encuentras en la Zona Negra, estos recortes deberían ser radicales.
Las tarjetas deberías encerrarlas bajo llave para no tocarlas. Ten en cuenta que siempre nos es más fácil pagar las cosas con las tarjetas, porque quizá somos menos conscientes del gasto que cuando pagamos en efectivo y entonces, al final, gastamos más de lo que lo gastaríamos si solo lleváramos efectivo.
Una medida interesante sería guardar las tarjetas en casa para alguna emergencia, pero no llevarlas encima.
Las deudas
Lo primero es pagar la deuda. Pero para ello necesitas dinero y si estas en la Zona Negra, casi no tienes. No pagues una tarjeta con otra, lo mismo se aplica a los préstamos. Te voy a contar algunos trucos para hacerlo a la velocidad de la luz.
Todos hemos tenido deudas alguna vez. Lo importante, si estás en un agujero, es dejar de cavar. Yo estaba ahogado en las deudas, pendiente de juicio por varias financieras, llamadas a todas horas de otras, un drama.
Con todas estas deudas y sin poder hacer frente casi a los pagos mensuales, yo dormía como un bebe. Tres horas seguidas y me despertaba llorando. Esto tenía que cambiar y encontré el método.
Para empezar…
Analiza toda la deuda que tienes. Analiza el interés que estás pagando. Comprueba cual es el crédito o tarjeta con el interés mensual más alto. Seguramente será un crédito rápido o los nuevos llamados pocket. Suelen tener un interés que va del 24 al 26 %. ¿Tú sabes cuánto dinero es eso?
Afortunadamente no suelen cobrar comisión por cancelación parcial, lo que quiere decir que, una vez analizado cual es el crédito que más interés estás pagando, céntrate, focalízate en pagar ese crédito. Todo el dinero que saques extra úsalo para pagar ese crédito.
Imagina que estás pagando, por ese crédito, una letra tan pequeña como 60 € que, pensarás, que no van a ningún lado. Quizá solo debas de ese crédito la irrisoria cantidad de 2.000 euros, pero ese crédito te está comiendo.
Porque, además, según pagas tienes el dinero para volverlo a gastar. Claro, menos los intereses. Es decir, que estás pagando el préstamo a un interés compuesto. Esto quiere decir que estas pagando mucho más de lo que crees.
Más adelante te explicare que es el interés compuesto y cómo usarlo a tu favor. Por ahora baste con que te diga que ese préstamo es el primero que te tienes que quitar. Una buena forma de hacerlo es añadir al importe que ya pagas de ese crédito (los 60 €) el 10 % de tu sueldo.
Imagínate que, echando horas extras, vendiendo unas bicis que tenías sin usar, tu colección de cds, un mp3, y una equipación de ski que usaste una vez, etc, a una tienda de segunda mano o usando métodos para Ganar Dinero en Internet y generar ingresos pasivos como los que explico en mi blog, en total has logrado quitarte ese préstamo de 2.000 euros.
Ahora, pensarás, tienes 60 euros más al mes. Los que gastabas para pagar ese préstamo y, pensarás que quizá, no es mucho, pero yo te aseguro que si lo es. Solo que esos 60 euros ya están reservados.
Los aceleradores de pago
Cuando termines de pagar tu primer crédito, invierte la cantidad que le dedicabas, a pagar tu segundo crédito de más alto interés. Ahora le toca al segundo préstamo con el interés más alto, seguramente otro crédito rápido en otra compañía o una tarjeta de crédito.
Bien pues, además de pagar la letra que estabas pagando de este segundo préstamo, pongamos de 70 €, volvemos a focalizarnos en él. Todo lo que entre extra va para pagar este préstamo y, además, le sumamos los 60 € que usábamos para pagar el crédito anterior.
Por lo que, a nada que consigamos pagar 10 euros más, nos lo habremos quitado en la mitad de tiempo y así seguiremos con el siguiente para el que tendremos 130 euros adicionales, para cancelar cada mes (60 € del primero + 70 del segundo).
Reducirás hasta casi la mitad el tiempo de amortización de todos tus créditos.
Evidentemente, en cuanto nos hayamos quitado todas estas deudas, te aseguro que estarás, si no en la zona verde, cada vez más cerca.
La excepción que confirma la regla
Si tienes una hipoteca, no sigas con este préstamo como te he contado hasta ahora. Seguramente sea el último préstamo que te queda, pues es el que tiene el interés más bajo. Ya has pagado los préstamos de alto interés.
Ahora y, antes de pagar tu hipoteca, déjame hablarte de la deuda.