
Que Internet ha cambiado nuestro día es algo incuestionable. Todos los ámbitos de nuestra vida se han visto influenciados en mayor o menor medida por la llegada del mundo online y las nuevas tecnologías son parte de nuestra rutina diaria. Nos relacionamos y conocemos gente por aplicaciones, llevamos a cabo operaciones comerciales y cuestiones laborales de forma online y buscamos todas las respuestas que necesitamos en este gigante llamado Internet. Es nuestro «experto» de cabecera para cualquier área.
Y esto se aplica a todo. El mundo de las finanzas tampoco es ajeno al boom de Internet y también ha cambiado radicalmente en los últimos años. Y no ha sido en solo un aspecto, sino a nivel global. Un claro ejemplo es la abundante oferta de préstamos online que hay en la actualidad y el gran número de entidades que los ofrecen.
Los prestamistas privados, más jóvenes y novedosos entraron en España hace pocos años y lo hicieron integrados en este nuevo mundo. Y los bancos tradicionales, más conservadores, se han tenido que ir introduciendo en este mundo debido a la elevada competencia. Algunos con su marca y otros creando una exclusivamente para estos servicios.
5 consejos para conseguir préstamos online sin estafas ni fraudes
Sin embargo, la llegada de Internet también supone un nuevo escaparate en el que, desafortunadamente, se han colado empresas fraudulentas que buscan hacer negocio de la necesidad de muchas personas que necesitan financiación y que desconocen cómo funciona el mundo de los préstamos online. Estas circunstancias nos hacen vulnerables. Queremos agarrarnos a un «clavo ardiendo». Hay que tener cuidado, pero con precauciones básicas lograremos evitarlas.
A continuación, te enumero cinco consejos que pueden serte de gran utilidad para desconfiar de una empresa:
- Nunca debemos dar dinero por adelantado: las empresas financieras legales jamás nos pedirán dinero antes de concedernos un préstamo online. Será al concluir cuando nos cobrarán por el servicio prestado.
- Buscar opiniones en foros y comparadores: si no conocemos o no nos suena una empresa, lo mejor que podemos hacer antes de realizar la solicitud es buscar opiniones sobre ella de otros usuarios en foros o comparadores financieros.
- Sellos de garantía: hay sitios web que son galardonados por asociaciones de consumidores online e incluyen sellos de garantía que les son otorgados en sus páginas.
- Protocolo de seguridad: las páginas web que incluyen en la barra del buscador el código https:// y un candado de color verde son seguras y fiables, ya que aseguran que nadie podrá acceder a nuestros datos.
- No nos pueden sacar de ASNEF: aunque nos prometan que su departamento jurídico nos quitará de un fichero de morosos como ASNEF, RAI o EXPERIAN, no debemos fiarnos, ya que la única solución es pagar la deuda y pedir que nos saquen de la misma.
Si atendemos estos consejos o trucos podremos conseguir créditos online de forma mucho más segura evitando estafas y fraudes. Es recomendable que no nos dejemos guiar por la primera opción que nos encontremos en el mercado.
Hal-Cash, Instantor, Pich y otros servicios ligados a los créditos online
Aun así, los beneficios que tiene optar por los préstamos online y por Internet son muchos más que sus desventajas. Ya no solo por la amplia oferta que se ha generado en los últimos años debido, en gran medida, al auge del fintech (término empleado para la unión de finanzas y tecnología), Internet también ha sido partícipe del nacimiento de numerosos servicios y herramientas que hacen aún más veloz, cómodo y sencillo el proceso de conseguir préstamos online. Un ejemplo es el Hal-Cash, por el cual podemos retirar efectivo en cajeros con nuestro móvil. Sin necesidad de introducir una tarjeta.
Pero hay mas ventajas que nos trae la red de redes. Poder verificar datos bancarios y financieros personales de los solicitantes de los préstamos online es otra de las grandes novedades que muchos prestamistas han sabido adaptar a sus negocios. Con servicios como el que ofrecen Instantor o Pich la entidad podrá estudiar nuestro perfil y verificar nuestros datos bancarios y financieros de forma cómoda, veloz y sencilla.
En resumen…
Aunque parezca de sentido común, nuestra necesidad puede nublar nuestro buen juicio. Comparar todas las condiciones también debería ser clave. Teniendo unas precauciones básicas, como las que te enumero en este artículo, puedes aprovechar esta financiación. Siempre hay que leer la letra pequeña. En algunos prestamos el interés llega a pasar el 2000 %. Los servicios añadidos pueden hacer que nos decantemos por uno u otro crédito. Elige con la cabeza fría. No dejes que la «urgencia» de tu situación hipoteque tu vida.
Y, por supuesto, libérate de la deuda lo antes que puedas. Te ahorrarás un dinero importante solo en intereses.